Esta es una ruta por Collserola fácil y que ofrece unas vistas espectaculares y desconocidas de la ciudad. Por el camino nos iremos encontrando con pequeñas sorpresas que nos hacen más ameno el camino.
Toda la ruta está perfectamente señalizada con lo que no hay problema de pérdida. Además, guardé el recorrido en la aplicación de Wikiloc, facilitando así que podáis hacerla sin ningún problema.
¿Cómo llegar?
La ruta empieza en el Castell de la Torre de Baró (Nou Barris).
La forma más fácil y cómoda de llegar es con la línea de autobús 82 y bajar en la parada de Castell de Torre Baró. La parada está justo delante de este edificio emblemático de Nou Barris.
El Castell de Torre Baró fue concebido como un hotel. Era un proyecto de ciudad jardín coetáneo con los proyectos de urbanización del Park Güell y la avenida Tibidabo. Este proyecto estaba orientado a las clases medias a diferencia de los otros dos que estaban pensados para la burguesía de la época.
El proyecto fracasó por problemas económicos y de comunicación pero quedó el edificio y la carretera Alta de Roquetes que lleva a él.
Justo aquí hay la parada de autobús la línea 82
A finales del año pasado acabó la restauración del inacabado edificio y actualmente es un mirador gratuito de 360º a Barcelona y al Vallès. En el mirador hay panópticos y en la planta baja plafones explicativos del proyecto y de la zona hechos por el Museu d’Història de Barcelona.
Panópticos facilitan la interpretación de todo lo que vemos
Horario de apertura:
Lunes-Jueves de 10 a 13h
Sábado de 10-17h
Domingos de 10-14h
Si no estuviera abierto, se pueden consultar igualmente los panópticos que hay fuera del edificio que son los mismos que los que se encuentran arriba.
¡Empecemos a caminar!
Cruzamos la carretera y cogemos el sendero de pequeño recorrido que hay justo delante (PR-C 171). Vamos ascendiento poco a poco y dejamos el castell de Torre Baró a nuestra espalda. Es muy recomendable mirar hacia atrás para disfrutar de las fantásticas vistas de la ciudad.
No hay que perderse la vista que dejamos detrás nuestro.
Aunque hay tramos que el camino se estrecha un poco, el recorrido es muy fácil y muy agradable por la sensación de estar en la montaña con unas vistas increíbles a la urbe.
Con la sensación de estar en la montaña y tener la ciudad a nuestros pies.
Llegamos al Coll de Canyelles donde hay la posibilidad de sentarse un rato en un par de bancos que hay para contemplar la ciudad.
En el Coll de Canyelles hay dos bancos perfectos para contemplar la ciudad.
Con un poco más de ascenso llegamos al Turó Blau donde podemos ver a la derecha del camino una vista panorámica del Vallès y el macizo de Montserrat al fondo.
Seguimos un ascenso moderado hasta llegar al punto más alto, el Turó d’en Segarra donde encontraremos una antena de comunicaciones.
En este punto empezamos el descenso. Esta es la parte más dificultosa de la ruta. El descenso es pronunciado y se debe tener cuidado de no resbalar con las piedras que hay sueltas por el camino.
Este descenso es la parte más dificultosa de la ruta.
Una vez llegamos abajo, nos encontramos con el Coll de la Ventosa. Es el límite con Montcada i Reixac. Aquí encontramos la carretera y, si uno está cansado, tiene la posibilidad de coger línea 102 de autobús en la parada de Coll de la Ventosa que enlaza con la L3 y L5 del metro.
En este punto hay la opción de coger un pequeño desvío para visitar un sitio curioso y algo desconocido, Can Masdéu y el antiguo Hospital de Sant Llàtzer. Hay que bajar unos 10 minutos por un camino perfectamente acondicionado.
Un poco de historia del lugar:
Los enfermos de lepra estaban en un edificio al lado del Hospital de Sant Llàtzer en el carrer del Carme. En 1904 fueron trasladados a esta masía que estaba situada en la Vila de Sant Joan d’Horta, a las afueras de la ciudad. La gestión fue adjudicada al Hospital de la Santa Creu. La casa de campo disponía de terreno de regadío procedente de dos minas que tenía la propiedad. Así los enfermos que allí vivían, podían autoabastecerse con el cultivo de la tierra.
En 1929 cambió el director del centro y quiso visitar el centro para buscar una nueva ubicación . Viendo en las condiciones en las que vivían aquellos enfermos, decidió varias mejoras del centro y la construcción de un nuevo hospital.
En 1950 ya estaba listo el nuevo hospital pero por aquél entonces, la vieja leprosería de Can Masdéu, había mejorado mucho las condiciones de vida y sus internos pidieron no cambiarse de ubicación. Era tiempo en que había muchas infecciones por tuberculosis y decidieron utilizar el nuevo hospital como Sanatorio antituberculoso. En 1955 se especializó como Sanatorio de la Santa Creu para Niños Tuberculosos.
En 1961 cerró Can Masdéu y se trasladaron los enfermos con lepra que quedaban a otras instalaciones más modernas. El proyecto que había era hacer allí una residéncia psiquiátrica para trasladar a los enfermos del Instituto mental de la Santa Creu. El proyecto no llegó a consolidarse y el edificio quedó en desuso. Si os interesa toda la historia os animo a leerla completa en el enlace proporcionado al final de la entrada.
Actualmente vive un colectivo ocupa autogestionado, Vall de Can Masdéu. En su página web explican todo su proyecto y todas las actividades que hacen. Una buena manera de informare es hacer una ruta que organizan cada domingo de 12-13:30h, la Ruta dels diumenges. Cultivan sus propias verduras en sus huertos. Cada jueves hay la posibilidad de ayudar y aprender cómo llevar un huerto con una comida comunitaria gratuita para todos los participantes.
Centre ocupa Vall de Can Masdéu
El hospital de Sant Llàtzer actualmente parece desocupado pero hay cámaras de vigilancia en todo el perímetro y en un lateral había coches y leña cortada. Igual vive alguien que vigila las instalaciones, lo desconozco.
Antiguo Hospital de Sant Llàtzer.
Es momento de volver a subir al punto del Coll de la Ventosa por el mismo camino que hemos bajado.
Cruzaremos la carretera y cogeremos con el GR 173-3 (Sendero de Gran Recorrido) que enlaza con el passeig de les Aigües. Aquí tenemos dos opciones, seguir por el passeig de les Aigües o coger un pequeño desvío para pasar por Can Ferrer que al final, termina en el mismo passeig de les Aigües.
En este punto puedes seguir el passeig de les Aigües o desviarte a la masía de Can Ferrer.
Increíbles vistas a la ciudad.
Nosotros decidimos pasar por masía particular de Can Ferrer para alargar un poco la ruta. Al pasar por la finca, el camino se bifurca en tres. Los tres desembocan al passeig de les Aigües. Nosotros cogimos el sendero más pequeño de la izquierda.
Una vez te incorporas al amplio passeig de les Aigües sigues unos 15 minutos más pasando por la zona del Forat del Vent y a la derecha se encuentra Casa Juaco. Un pequeño asador especializado en carnes a la brasa muy frecuentado por ciclistas y senderistas. Uno puede hacer un esmorzar de forquilla, comer un menú a mediodía o una calçotada en temporada. Nosotros fuimos un martes y estaba muy lleno. Seguramente los fines de semana es un lugar muy concurrido. El restaurante tiene también acceso para coches des de la carretera de Horta a Cerdanyola.
Asador Casa Juaco.
Nosotros hicimos parada y pedimos el menú del día que incluía calçots de primero.
Calçots en Casa Juaco.
Si no os apetece comer en un restaurante, hay un montón de rincones para comerse un bocata o hacer pícnic.Uno de ellos está un poco más adelante. El camino indica un mirador a la izquierda. No os de pereza subir, es sólo el caminito que seve. Es un mirador a la zona del Vallès donde hay bancos para poder sentarse y sombras de árboles.
Un rincón del mirador perfecto para hacer pícnic.
Siguiendo el passeig de les Aigües, la ciudad se ve diferente con el sol de tarde. Se ven perfectamente els Tres Turons (Rovira, Carmel y Creueta del Coll de izquierda a derecha). Este tramo es especialmente agradable de pasear. Sin ningún desnivel es fácil dejarse llevar tranquilamente contemplanto la ciudad.
Sol de tarde sobre la ciudad.
En esta curva se empieza a ver les Tres Xemeneies y al acercarse, se va abriendo la vista al mar y a la ciudad.
Les Tres Xemeneies.
Pasado este punto, nos encontraremos con un poste de la luz. Es el lugar de empezar a descender.
En este punto hay que coger el sendero de la izquierda.
Al principio es un poco empinado y con piedras que resbalan. Tranquilos, son sólo 5 minutos. Después se une a un camino ancho que va haciendo zig-zag y descendiendo de manera muy gradual.
El descenso es gradual.
Este camino lleva directamente a les Llars Mundet que una vez se cruzan, llegas a la avinguda Diagonal. Aquí hay una parada de autobús con diferentes líneas y la parada de metro Mundet de la Línea 3.
Espero que os haya gustado la ruta y os animéis a hacerla. ¡Os encantará!
Ruta en Wikiloc
Inicio. Autobús 82 parada Castell Torre Baró.
Final. Metro L3 Mundet.
Total 10,11 km
PN Collserola: Castell de Torre Baró-Llars Mundet
Enlaces de interés:
Web 3/24. Portes obertes al castell de Torre Baró, un nou mirador de Barcelona.
Blog de Santa Creu i Sant Pau. Can Masdéu i l’hospital de Sant Llàtzer, 1902-1973.
Web Canmasdeu
Web Casa Juaco
Web PN Collserola
